Todo empezó por una foto colgada en Facebook en la que me
etiquetan. Accedo al “muro” y veo que hay un cachorro blanco y el texto de la
compañera Elena del Centro de Visitantes de Venta Nueva en Cardeña en el cual decía que un perro abandonado había aparecido por su propio pié allí. Estaba delgado, es bastante social y se deja
acariciar.
Pongo
en marcha la “máquina de los contactos” y creo que puede ser un buen candidato
para poder cederlo a algún ganadero de la comarca de Los Pedroches y así poder
guardar el ganado. Por mi actual trabajo, sé que hay una clara relación de
bajas por depredación de fauna silvestre y la no tenencia de perros guardianes
del ganado, lo cual puede verse traducido en el uso de artes ilegales, como el
veneno, para poder evitar las pérdidas económicas que los ganaderos pueden
tener.
Fue
curioso pero en todas las llamadas que realicé, todos los ganaderos con los que
contacte me dijeron que estaban interesados en que les llevará el cachorro. En
primer lugar le pasé el lector de microchip por si lo tuviera puesto, pero no
fue así, pues de lo contrario el procedimiento para poder hacerme cargo del
perrito no hubiera podido tener el final feliz que ha tenido.
Quedó
con Elena en el Centro de Visitantes para recoger a “Antonio” como le ha puesto
la compañera que durante tres días, le puso agua y pienso. Lo llamo, se me
acerca meneando el rabo, lo acaricio, me agacho a su altura para que no me vea
como una amenaza y lo cojo en brazos para subirlo al coche. Se queda
paralizado, pero lo tranquilizo hablándole y acariciándolo de nuevo: “Amigo,
dentro de poco estarás en buenas manos”.
El viaje de 50 km, transcurre sin incidencia y “Antonio” ni se menea en el traslado. Llegamos a la explotación en extensivo del ganadero Miguel Moreno, sus 1000 ovejas esperan la adopción de este fantástico cachorro. Al principio el miedo le puede, pero una vez que baja del coche, empieza a menear el rabo y parece como si todo estuviera en su sitio. La primera prueba de “Antonio” es ver cómo reacciona ante unas borregas que Miguel tiene apartadas en una nave. El perro entra en la corrala y se lía a lametones con las borregas, mientras menea el rabo y estas lo miran con mucho interés. Todo ha ido bien y “Antonio” tiene nuevo hogar y nuevas hermanas.
Gracias a la colaboración de Elena y a Miguel Moreno, “Antonio” tiene una nueva oportunidad.
Saludos, Ivan.
"Antonio" cuando apareció en el Centro de Visitantes de Venta Nueva en Cardeña.
El ganadero Miguel Moreno ubicando a nuestro cachorro estrella en su nueva ubicación para enseñarlo a estar con las ovejas.
Las primeras "hermanas" del cachorro "Antonio" con la máxima expectación por esta nueva visita.
Aún no tengo el gusto personal de conocerte, pero te HONRA mucho lo que has hecho.
ResponderEliminarFdo.
Javier Ruiz (Azuel-Cardeña-/Chiclana de la Fra.)
Te felicito por la acción. La historia me ha gustado mucho, ya conoces mi sensibilidad para con los animales y en especial los perros. Sólo un pero, no me gustan los nombres de los racionales? para estos compañeros tan fieles. Espero que tengas ocasión de hacerle un seguimiento y nos lo puedas mostrar en unos meses junto a sus "hermanas".
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar